Última visita al terminal antes de morir por quinta vez

Perros resfriados en el piso
Palomas merodeando por el pasillo.

Dolor de cabeza. Nauseas. Nudillos rotos.
Alma muerta, de luto, con miedo.

Chichones, tacones, moretones.
Ropa salada. Atuendo de lágrimas.

Mutilada. Arañada. con resaca de llanto.
Muerta de nuevo. Una y otra vez.

Sedienta de coma.
Trastornada de odio.

Transformo la poca energía que me va quedando en recuerdos cada vez mas repetitivos, como un déjá vu constante, como un vhs húmedo, como un payaso de circo en quiebra.

Reviso mi bitácora de viaje y leo un "te amo", muero por cuarta vez en menos de diez minutos.

No culpo al más enfermo o al menos enfermo.
El camino fue el errado, el tiempo el erróneo, los cuerpos los tristes.

Enredos mal echos.
Sólo fue el destino cuando se torna traicionero.

Me subo al bus. Ya estoy preparada para morir por quinta vez.

No hay comentarios: